El 31 de diciembre de 1826, Bolívar
que ha regresado del Perú urgido por los conatos y tendencias separatistas en
Venezuela, se halla en Puerto Cabello luego de pasar por Maracaibo y Coro. Bolívar viene acompañado de un ejército
porque Venezuela está a punto de arder en una gran guerra civil. De un lado Páez y sus partidarios pugnando
por la separación de la
Gran Colombia y del otro los que se mantienen fieles a la
unidad defendida por el Libertador.
Páez se halla atrincherado en
Valencia y se ha batido varias veces contra Puerto Cabello defendido por
Briceño. Bermúdez también se ha batido
contra Cumaná y la hostiliza desde Barcelona.
Los partidos y las partidas se baten en todo el territorio. Bolívar quiere a toda costa evitar la guerra
civil y demanda a Páez una entrevista.
Páez, duda, teme, no sabe qué hacer.
El doctor Miguel Peña, adversario del Libertador, calienta sus orejas. Bolívar ha escrito desde Coro a Páez, jefe
civil y militar de Venezuela y el 31 de diciembre vuelve a escribirle con
Wilson, su único edecán. Páez al saber
que Bolívar viene con todo un ejército a someterlo, le da un ataque y es
llevado a cama en Valencia. El
Libertador le explica en la carta el porqué de la presencia de un ejército y le
dice que no ha tenido parte en las turbulencias de Venezuela. “He venido porque usted me ha llamado;
ninguna ambición me anima, puesto que no he querido aceptar la oferta de usted
ni de la dictadura que han ofrecido las actas de los pueblos. Ahora bien, tampoco quiero la guerra porque
ella matará a la patria. Yo ofrezco
convocar al pueblo para que determine lo que quiere y haga cuando alcance su
poder. Haré más, me iré a Colombia el
día que se reúna; por consiguiente, ninguna mira política me animará a tomar
partido para nada. Unámonos pues, para
salvar a nuestros infelices hermanos. Basta
de sangre y de ruinas en la pobre Venezuela.
¡Mil maldiciones le acompañen al infierno al que pretenda levantar su
poder sobre sus escombros amasados de sangre!...”
Bolívar y Páez terminan
entrevistándose en Naguanagua. Se
reconcilian y juntos pasan a Caracas
donde el Libertador es objeto de un recibimiento apoteósico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario