El 6 de enero de 1820 el
soberano Congreso de Angostura decretó para Simón Bolívar el título de
Libertador y dispuso que en todos los despachos y actas del gobierno lo
antepusiese al de Presidente y, en caso de dejar de ser Presidente de Colombia,
lo conservara como una propiedad de gloria en cualquier otro destino, y en el
retiro mismo de los negocios públicos.
Dispuso también el Congreso de Angostura que el retrato
de Bolívar fuese colocado bajo el sol del parlamento con esta inscripción en
letras de oro: solio “Bolívar, Libertador de Colombia, Padre de la Patria , Terror del
Despotismo”.
El decreto del Congreso de Angostura tuvo su raíz en la
declaración de la Asamblea
de Notables de Santafe de Bogotá del 9 de Septiembre de 1819 que concedía
destinaciones particulares a los vencedores de Boyacá y honores del triunfo al
héroe Simón Bolívar. Pero este decreto
del Congreso de Angostura firmado por el Vicepresidente Francisco Antonio Zea,
fue más amplio en sentido de que el reconocimiento no sólo lo circunscribe y
los vencedores de Boyacá sino a todos los individuos del ejército que emprendió
la Campaña ,
incluyendo los que perdió en su paso de los Andes, los patriotas que se le
unieron y los hombres y mujeres que se distinguieron en la campaña. El Congreso
decretó el reconocimiento de todos ellos como Libertadores de Cundinamarca y
dispuso que sus nombres se inscribieran
con la clasificación y separación correspondiente, en la columna del triunfo de
Boyacá decretada por la
Asamblea de Boyacá. Dispuso asimismo Medalla grabada y
esmaltado en rojo el nombres de y para los libertadores de Cundinamarca,
Medalla esta que podían usar pendiente del cuello las viudas de los
libertadores muertos. Finalmente los
nombres de los Libertadores se debían proclamar por bando con música militar y
salva de artillería en las capitales, plazas fuetes y demás ciudades en las
fiestas aniversarias del establecimiento de la República.
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