sábado, 20 de julio de 2013

El Matrimonio de Sucre

Doña Mariana Carcelén y Larrea

            El 20 de abril de 1828 el Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José de Sucre, contrajo matrimonio con la Marquesa de Solanda, Mariana Carcelén y Lagarrea, en Quito.

            Sucre era entonces Presidente de Bolivia y su matrimonio tuvo que hacerlo por poder.  De esa capital del Ecuador también salieron Manuelita Sáenz, amante del Libertador y Mercedes de Jigón, esposa del general venezolano Juan José Flores.
            La Marquesa de Solanda era una mujer aristocrática, encantadora y frívola. Sucre se casó con ella después de seis años de amores y de ausencia.  Lo hizo ya cuando quiso retirarse a la vida privada.  Estaba bastante pobre cuando eso.  Tanto así que en una carta que dirige al Libertador, le dice:  “una buena suerte me pone fuera del caso de los generales de Napoleón, de quienes se dice que después de ricos no querían trabajar.  No cuento para vivir más que con lo que tiene mi futura mujer y estoy contento.  Ella me dará el pan y yo le daré los honores que me ha dado la guerra, porque aún renunciaré a los títulos.”
            Para  el  Matrimonio, Sucre  compró  en  Quito  la  histórica  “Casa Azul”, elegante mansión  colonial, esquinera  y  de  dos  pisos, que  había  pertenecido  al marqués  de  Villa – Rocha.  Entre esta mansión colonial y el fundo de Chisinche, discurren los últimos días del vencedor de Ayacucho.  Un año después tuvo su única hija:  Teresita, la cual motivó esta carta al Libertador:  “Mi mujer ha parido el 10 de este mes.  Desgraciadamente me ha dado una niña en lugar de un soldado que yo quería para la patria.”  En junio de 1830, la Marquesa quedó viuda.  Sucre había sido asesinado en la espesa montaña de Berruecos.  Tiempos después se casó con el General Isidro Barriga, quién tenía fama de disoluto y donjuanesco.  Teresita, la hijita de Sucre, murió trágicamente al caer desde lo alto de un balcón cuando se hallaba en los brazos del padrastro.

6 comentarios:

  1. Es lamentable la muerte de Teresita Sucre. no cabe la menor duda que fue victima a temprana edad de la traición y la codicia por el poder de los enemigos de la libertad y la patria. Los enemigos de la idea Bolivariana de Patria. Que dios la tenga en su santa gloria. La patria Bolivariana te recuerda y te honra.

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  2. Es lamentable la muerte de Teresita Sucre. no cabe la menor duda que fue victima a temprana edad de la traición y la codicia por el poder de los enemigos de la libertad y la patria. Los enemigos de la idea Bolivariana de Patria. Que dios la tenga en su santa gloria. La patria Bolivariana te recuerda y te honra.

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  3. Es lamentable la muerte de Teresita Sucre. no cabe la menor duda que fue victima a temprana edad de la traición y la codicia por el poder de los enemigos de la libertad y la patria. Los enemigos de la idea Bolivariana de Patria. Que dios la tenga en su santa gloria. La patria Bolivariana te recuerda y te honra.

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  4. Es lamentable la muerte de Teresita Sucre. no cabe la menor duda que fue victima a temprana edad de la traición y la codicia por el poder de los enemigos de la libertad y la patria. Los enemigos de la idea Bolivariana de Patria. Que dios la tenga en su santa gloria. La patria Bolivariana te recuerda y te honra.

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  5. Definitivamente la ija de Sucre fue asesinada, no cabe la menor duda. El ambiente que la rodeaba era de gente con pensamientos de poder y ansias de fortuna.

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  6. Otra victima inocente de la oligarquía granadina. el legado de Sucre, el Abel de américa, desaparecería a manos de un ser gris y pobre como este general. Ni el propio Bolívar superaba en talento militar a el Gran Mariscal de Ayacucho. Hoy su nombre es inmortal y sin el la historia Americana estaría incompleta.

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