lunes, 8 de julio de 2013

Humboldt en Angostura



El 14 de junio de 1800, Alejandro de Humboldt, acompañado de Amadeo Bonpland y un indio guaiquerí de nombre Carlos del Pino que lo siguió durante todo su recorrido, llegó a la ciudad de Angostura.
Llevaba el científico y explorador alemán 75 días navegando el Apure, el Orinoco, el Atabapo, Río Negro y Casiquiare, coleccionando especies botánicas, animales, analizando el clima y haciendo variadas mediciones de tipo geográfico, hidrográfico y orográfico.
Gobernaba la provincia de Guayana don Felipe Inciarte, quien recibió a Humboldt y a Bonpland con todos los honores que merecían quienes estaban prestando un invalorable servicio científico a España y al nuevo continente.
Tenía Angostura entonces seis mil habitantes y el gobernador Inciarte había alojado a sus huéspedes en la casa del Secretario.  Humboldt y Bonpland que llevaban meses navegando los ríos de Guayana en curiaras estrechas, expresan en el libro “Viaje a las Regiones Equinocciales del Nuevo Continente”, el sentimiento de alegría que los embargaban al pisar tierra angostureña:
“Quedamos sorprendidos de las comodidades que dan al hombre civilizado la industria y el comercio; habitaciones modestísimas nos parecían magníficas, y a cuantos nos dirigían la palabra, los considerábamos agudos e inteligentes.  Después de tan largas privaciones, nos procuraban gran placer verdaderas pequeñeces; con gozo indecible volvimos a ver por primera vez pan de trigo en la mesa del Gobernador.  Sentirse de nuevo en el seno de la cultura es un gran placer, pero no duró mucho para el que es capaz de captar vivamente las maravillas de la Naturaleza en la zona tropical.  Pronto se olvidan las penalidades sufridas, y tan pronto como se está en la costa, en tierra habitada por colonos españoles, se trazan ya proyectos para volver al interior”.
Humboldt y Bonpland permanecerán, sin embargo, 26 días en Angostura, atacados por la fiebre malárica,  a la que  sobrevivieron a fuerza de miel y extracto de quina del Caroní, no así su criado el guaiquerí Carlos del Pino, quién murió ocho días después de haber caído enfermo.



1 comentario:

  1. Maravilloso, y sembro un árbol en la casa del Congreso que ha sido mermado en sus raíces..

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